Garand Sniper

Más vale tarde que nunca

Cuando Estados Unidos entró en la Segunda Guerra Mundial su ejército y el cuerpo de Marines no tenían fusil de francotirador. La cúpula militar estaba deseosa de adoptar uno semiautomático, el ingeniero mecánico John C. Garand, quien durante la Primera Guerra Mundial se interesó en las armas militares, diseñando una ametralladora ligera, fue el que dio la solución. Aunque su ametralladora ligera no tuvo éxito comercial, le sirvió para entrar en el Arsenal de Springfield en 1919. Allí comenzó a trabajar sobre un fusil semiautomático de cerrojo rotativo, recamarado al cartucho .276 Pedersen. De este modo, en 1929 después de unas pruebas muy duras, fue seleccionado como arma potencial para el ejército. En 1932 el diseño fue perfeccionado, pero el Jefe del Estado Mayor del Ejército, general MacArthur, se negó a la adopción de un fusil calibre .276, entonces, el fusil Garand, como se lo conoce mundialmente, fue recamarado al .30-06 y el 9 de enero de 1936 fue adoptado como M-1. Como es lógico quisieron adecuarlo para esta tarea, pero había un inconveniente, se cargaba por arriba y expulsaba las vainas por el mismo lado.

 

Una solución de compromiso

Distintas configuraciones del M-1 Garand en una publicación de la época. Debajo vemos un M1D y por encima de éste, un M1C.

Para salir del atolladero, a comienzos de 1943 volvieron a su Springfield modelo 1903 A3, al que Remington modificó ligeramente  para acoplarle un visor y pasó a llamarse U.S. Rifle Caliber .30 M1903 A4 Sniper. De estos fusiles se fabricaron varios cientos de miles, en espera de que se encontrara una solución positiva con el Garand M-1. Después de muchos ensayos quedó claro que debía montarse el visor sobre el costado izquierdo (es decir no sobre el axis superior del cañón) y de este modo, tanto la carga como la expulsión de vainas no se vería afectada. Se hicieron dos prototipos: el M1E7 con una montura de carril deslizante producida por la célebre armería Griffin & Howe, de Nueva York, unida por tres tornillos y dos pasadores a la carcasa del cerrojo del M-1. Se lo adoptó el 27 de julio de 1944 con el nombre de U.S. Rifle Caliber .30 M1903C Sniper.

El segundo fue denominado M1E8, llevaba una montura fija acoplada a la recámara. Éste fue diseñado por John C. Garand y se lo adoptó con el nombre de U.S. Rifle Caliber .30 M1D Sniper. Ambos fueron puestos en producción de inmediato.

El U.S. Rifle Caliber .30 M1C Sniper fue producido por el Arsenal de Springfield y se utilizaron armas cuya numeración fue aproximadamente desde 3.100.000 a 3.800.000. Sus visores fueron Weaver Alaskan de 2,2 aumentos y también Lyman, ambos con una retícula de cruz muy fina con la denominación militar M73, posteriormente se los dotó de un tubo sobre el ocular para evitar reflejos y se los redenominó M81. Éstos duraron muy poco, pues se hizo una mejora al dotar a la retícula de fina cruz de un poste central inferior y se los conoce como modelo M82.

El 25 de enero de 1945 se los dotó de una apagallamas modelo M2, que se colocaba en el enganche de la bayoneta. Posteriormente, se los cambiaría por T37. Como con el uso se demostró que cualquiera de los dos apagallamas empeoraba la precisión del arma, muchos fueron quitados.

Un Springfield modelo 1903 A3, reconvertido en un U.S. Rifle Caliber .30 M1903 A4 Sniper, junto a un Garand M1C

El contrato total de los M1C fue de unos 21.158 fusiles, pero la falta de visores hizo que sólo 7.971 fueran finalizados con éxito, rápidamente pasaron a manos de los francotiradores del ejército y del Cuerpo de Marines hacia el final del conflicto en la Guerra del Pacífico contra el Imperio Japonés.

El U.S. Rifle Caliber .30 M1D Sniper, diseñado por John C. Garand, fue denominado como “Sustituto Estándar” y quedó relegado a un segundo plano. En ambos casos se los dotada de una almohadilla de cuero para alejar la cara de la culata y colocarla sobre el visor telescópico lateral.

Cuando la Guerra de Corea se convirtió una realidad, ambos fusiles de francotirador fueron nuevamente armados con mucha piecería remanente de la Segunda Guerra Mundial, y pasaron a manos de los Marines. El Arsenal de Springfield produjo 4.796 fusiles M1C entre 1951 y 1952. Finalizado el conflicto se siguieron produciendo más fusiles de francotirador con las piezas remanentes, se fabricaron entre 18.000 y 19.000 fusiles M1C más.

 

Datos sobre su producción

Dos soldados americanos se dan la mano, el de la izquierda con su nuevo uniforme, casco y fusil M-1 y el de la derecha con el atuendo de la 1º GM y fusil Springfield M1903 A3

Para su estudio se puede identificar los siguientes periodos de fabricación, aunque todos fueron realizados en el arsenal de Springfield:

-Producción durante la Segunda Guerra Mundial, finales de 1944 hasta finales de 1945. Estos llevaban el número de serie del fusil en la base de la montura deslizante Griffin & Howe, aunque existen algunos pocos ejemplares sin numerar.

-Producción entre 1951 y 1952, son fusiles armados con piezas de la Segunda Guerra Mundial. También llevaban el número de serie en la base deslizante Griffin & Howe, aunque la mayoría no coinciden en las numeraciones del arma y la montura.

– Posteriores a la Guerra de Corea. En ninguno coincide el número de serie del fusil con el de la base deslizante Griffin & Howe. Estas monturas son remantes de las Griffin & Howe de la Segunda Guerra y llevaban un acabado pavonado, aunque se produjeron nuevas y son parquerizadas.

 

A modo de final

El Garand Sniper en cualquiera de sus versiones dio poco juego en la Segunda Guerra Mundial, mucho en Corea y pasó al olvido, hasta que, en 1965, se retomó su idea con el M-14 M1-A, heredero directo del M-1.

Hoy es una pieza de colección y aún se los ve, sobre todo, en los campos de tiro de Estados Unidos.

José Cid