Swarovski  DS 5-25X52 P

Toda una proeza tecnológica

El Tirol es una de las zonas más turísticas de Austria. Una vez allí, quedas prendado de sus paisajes, de la belleza de la naturaleza y de la armonía que los austriacos han conseguido al conjugar la tradición con la tecnología.

La sede de Swarovski Optik está en Absam, una pequeña localidad cerca de Innsbruck, famosa por haber albergado en varias ocasiones los Juegos Olímpicos de Invierno con una excelente oferta hotelera y turística.

Innsbruck está habitada desde antes de la época romana, fue entonces cuando empezó a vislumbrarse la importancia del enclave, ya que se estableció una importante base militar. Es un territorio rebosante de historia y eso se palpa desde el primer momento al visitar su centro histórico, sus museos y alrededores.

El motivo de esta visita a Swarovski  Optik, realizada de la mano de su distribuidora en España, J. Esteller S.L. y ejerciendo como anfitrión su Director Xabier Esteller, era realizar la presentación de su nuevo visor el DS 5-25X52 P,  a una serie de armeros de España. Dado que es el visor más novedoso de la marca, nos interesaba conocer y entender la filosofía de su gestación y proceso de fabricación. Con este producto, Swarovski ha vuelto a dar un salto tecnológico como ya hizo en su día con el Z6.

Para entender el porqué de este producto uno tiene que observar detenidamente las instalaciones donde se produce y entonces ve una fábrica de última tecnología óptica encajada en un entorno precioso de la naturaleza. Una fábrica con su propia escuela de Formación Profesional, donde durante tres años se aprende la rama de óptica y de micro mecánica. Esta escuela es todo un ejemplo de lo que es un taller de formación. Está dotada de una maquinaria de alta calidad, fue un verdadero placer para mí ver el parque que tienen de máquinas, herramientas, fresadoras, tornos y fresadoras CNC de alta precisión. Siempre admiraré el estado natural las instalaciones en un día cualquiera: una limpieza absoluta, un orden magnífico y, algo que nos llamó mucho la atención, y que es una tónica en toda la fábrica: hay mucha armonía laboral. Entiendo el concepto de armonía, como un equilibrio entre todos los profesionales por cumplir sus tareas en el tiempo establecido para que todo fluya a una, con la concentración enfocada en tus objetivos en conexión con los de tus compañeros.

A los alumnos se les enseña los principios básicos de las dos ramas y, cuando digo básicos estoy hablando de limas y técnicas de fabricación óptica antiguas para tener unos conocimientos de ambas disciplinas desde la raíz. Después de los tres años de formación pueden pasar a trabajar en Swarovski Optik.

El visor motivo de nuestra visita es un aparato con un alto componente electrónico, del que solo llegas a entender su filosofía cuando profundizas mucho en toda su composición.

 

Como mucha de su tecnología es de desarrollo propio, necesita unas instalaciones a la altura y una protección de información digna de los más altos secretos de estado. Este detalle se podía notar con todos los niveles de seguridad que nos encontramos.

Un momento de la presentación

El visor motivo de nuestra visita es un aparato con un alto componente electrónico, del que solo llegas a entender su filosofía cuando profundizas mucho en toda su composición.

El visor nos mide y calcula parámetros, como distancia, energía del proyectil, punto de impacto etc., está dotado de un rango de aumentos de 5-25, y un objetivo de 52 milímetros, además de control de paralelaje.

También pudimos probar otros de los productos Swarovski.

 

 

Todos estos parámetros nos llevan a primera vista a pensar que el visor nos los podría hacer todo, pero esto es totalmente erróneo. El aparato óptico no está pensado para evitar errores de cálculo, de técnica de tiro, etc. El visor necesita de una concienzuda instalación y programación para que trabaje al cien por cien de sus posibilidades. Toda la información que nos suministra este accesorio en el momento antes de disparar no es solamente para impactar en el blanco, sino que también estos datos son para evaluar si nos conviene disparar, o no, y me explico: Imagínense que estamos enfocando con la retícula un magnífico trofeo, el visor nos indica la distancia a la que tenemos el blanco, pero también la energía con la que impactará el proyectil, la caída del mismo y, por consiguiente, el punto de impacto. También la desviación por el viento, así como si estamos fuera de rango tanto en caída del proyectil como desviación por viento lateral. Todos estos parámetros son para decidir si disparamos o no, nos ayudan a evaluar el trofeo y si técnicamente el disparo es viable, esto ayuda a no herir a la pieza y poder cobrarla. El visor nos da la información, la decisión del disparo es nuestra. Todo esto tampoco sirve si no tenemos una posición de tiro correcta, o sea que el tirador también tiene que hacer su trabajo. Tenemos que ver todo esto como una ayuda técnica para cobrar los trofeos más limpiamente y evitar sufrimiento innecesario del animal.

El visor es toda una proeza tecnológica, un alarde de diseño y una magnifica herramienta de cálculo para culminar magníficas jornadas de caza. Sin duda, volveremos a hablar de este prodigio.

Nota: agradezco la cesión del material  a J. Esteller, S.L., Polígono Industrial Molí dels Frares, Calle C, nº34, 08620 S. Vicenç dels Horts, Barcelona, tel: 936 724 510, fax: 936 724 511,

e-mail: jesteller@esteller.com

 

José Ramón Dominguis