North American Arms Pug

El puño de Utah

Siempre es mejor un arma pequeña a mano cuando la necesitas, que una más grande durmiendo en el armero en casa”. Este es el slogan comercial de North American Arms, un fabricante de diminutas armas cortas de defensa personal localizado en la ciudad universitaria de Provo, estado de Utah, Estados Unidos de América.

Como la mayor parte de las compañías norteamericanas, en North American Arms cuidan mucho a sus clientes y tras hacer una compra, envían regularmente por correo un montón de publicidad, desde ofertas de nuevos productos, hasta una revista que incluye una columna titulada “Because I was Armed” , cuya traducción sería “Gracias a que iba armado” donde se relatan casos de defensa personal donde los buenos ciudadanos han empleado armas de la compañía para defender su vida haciendo honor al eslogan más arriba citado. Y es que, según datos oficiales, un millón de armas de fuego son usadas anualmente en situaciones de defensa personal a lo largo y ancho de los EE.UU., prácticamente cada 48 segundos un ciudadano honrado debe defender su vida frente a los malhechores empleando un arma corta. Uno de ellos, según cita la columna de North American fue Jim Shaver, un quiropráctico que tenía consulta en una de las peores zonas de su ciudad y que una mañana cuando recorría el camino hacia su automóvil fue atacado por la espalda por dos individuos corpulentos que lo tumbaron al suelo y empezaron a golpearlo con saña. Hombre precavido, y en uso de su derecho constitucional de portar armas para su defensa, Jim estaba en posesión de un permiso para portar armas cortas ocultas y llevaba una SIG P229 del .40 S&W; a pesar de que les hizo saber a sus asaltantes que estaba armado y nada menos que dos veces, estos continuaron con su brutal asalto. Oculta bajo dos gruesos abrigos, Jim no podía acceder a su pistola SIG. Por fortuna, se había imaginado una situación similar y portaba una segunda, de último recurso (en los Estados Unidos conocida como back-up), un revólver North American Arms del .22 magnum, en el bolsillo derecho de su abrigo.

Tumbado en el suelo, y recibiendo una brutal paliza, Jim se las arregló para empuñar su diminuto revólver y disparar. El tiro atravesó la pelvis de uno de los criminales y éste hecho a correr despavorido ante el reguero de sangre. El proyectil del .22 Magnum le atravesó la arteria pélvica y su presión arterial había caído en picado desfalleciendo, tras recorrer apenas 200 yardas (unos 180 metros). El otro asaltante huyó de inmediato. Posteriormente ambos fueron detenidos y sentenciados a largas penas de prisión.

Jim Shaver, el ciudadano que sufrió y repelió la agresión, por supuesto quedó libre de cualquier cargo. Como él dijo en declaraciones posteriores a la prensa: “Mi caso no creo que disuada a los criminales, pero espero que persuada a los buenos y honrados ciudadanos a pensar dos veces sobre su seguridad personal y hagan uso del inalienable derecho que tenemos los americanos de disponer de los medios necesarios para defender nuestra vida”.

 

Pug, el mini revólver  en su máxima evolución

La primera vez que empuñe un diminuto revólver North American fue hace muchos años. Era propiedad de un buen amigo que lo usaba como tercer arma en su trabajo de ayudante del Sheriff. Sí, queridos lectores han leído bien, como tercer arma y es que una regla básica en el porte de armas cortas para servicio o defensa es llevar al menos una segunda arma de reserva (backup) y si pueden ser tres mejor. Sirva como ejemplo la anécdota ocurrida hace unos años cuando un instructor de la academia de tiro Gunsite fue invitado a participar en una competición de tiro rápido de IPSC donde los participantes, poco acostumbrados al empleo táctico de armas de defensa, se quedaron atónitos cuando el instructor de Gunsite, tras agotar la carga de su pistola 1911, sacó su segunda y más compacta 1911 y continuó el fuego. Y es que con el debido entrenamiento es más rápido empuñar la segunda arma de reserva que recargar la principal.

El caso es que mi amigo, después de tantos años, todavía porta este pequeño revólver en el bolsillo izquierdo de su pantalón durante el verano y en su chaqueta durante los fríos meses del otoño e invierno en Utah. Hace unos meses el veterano revólver acabó como regalo en el bolso de la fiscal del condado y mi amigo necesitaba un reemplazo. Viviendo a solo 15 millas de la factoría, es poco más que un paseo, muy agradable por cierto, visitar la planta y elegir un nuevo modelo. En este caso la elección recayó sobre el más evolucionado que ha dado la saga de los mini revólveres. Hablo del Pug, cuyo nombre deriva del latín Pugnus, o puño, que tiene un sistema de miras nocturna de alta resolución XS, un contrapeso solidario bajo el cañón para una más rápida adquisición del punto de mira en la repetición del disparo y unas cachas envolventes de mayor tamaño de neopreno.

El sistema de miras XS, que es quizá poco o nada conocido por los aficionados españoles, goza de gran popularidad aquí en los Estados Unidos y es un serio rival para las todopoderosas compañías Novak, Heinie y 10-8 Performance.  Se basa en un alza en “V” con un enorme punto de mira frontal en forma de círculo, lo que en tiro dinámico proporciona una gran velocidad en la toma de miras.

Puede que algún lector encuentre poco sentido emplear un sistema de miras tan caro en un arma que por sus características de construcción se debe emplear a distancias muy cortas, prácticamente a “bocajarro”, pero en situaciones de muy baja visibilidad el tritio hace su trabajo y se agradecen estas enormes miras. Otra de sus características es el nuevo cañón pesado con contrapeso solidario, que cuanto menos le da una apariencia intimidatoria en un arma de tan pequeñas dimensiones. Hay que destacar que la parte superior del cañón está rayada para evitar reflejos.

Una característica de todos los revólveres North American, es que el arma es perfectamente segura con los cinco cartuchos que admite su cilindro. No hay necesidad alguna de que el martillo descanse sobre una cámara del cilindro vacía. Para tal fin, éste tiene mecanizadas unas muescas entre cámaras, una vieja solución aplicada en los tiempos de los revólveres de avancarga. Por último quiero comentar que North American ofrece una increíble gama de accesorios para portar sus armas, todos ellos adaptados a las necesidades de cualquier tipo de cliente, desde un policía de servicio, pasando por un ejecutivo y acabando en un cowboy que cuida de su rancho.

 

Hornady Critical Defense   .22 MWR

Conocido popularmente como el .22 Magnum, el .22 Winchester Magnum Rimfire ha recibido en estos últimos años mucha atención por parte de los fabricantes americanos de munición. Si hay que buscar un “culpable” de la resurrección del .22 Magnum son precisamente los mini revólveres de North American Arms. Muestra de este resurgir del .22 Magnum, es que el pasado año dos importantes fabricantes de munición Speer y Hornady han lanzado al mercado cargas de defensa, especialmente diseñadas para armas cortas con pequeños cañones. Sobre la de Speer no puedo hablar ya que en esta parte del país es difícil de encontrar, sin embargo la carga de Hornady es común en las armerías locales de Utah. La de Hornady, que se comercializa en la nueva línea “Critical Defense” emplea una punta de .45 grains del nuevo tipo FTX (Flex Tip Expanding,)  diseñadas para conseguir una expansión óptima con una velocidad en boca de 1000 pies por segundo, unos 304 metros por segundo. Según dice la publicidad de la compañía ofrece la misma capacidad de penetración de una carga del 9mm corto, Hornady no dice nada de la energía en boca ni factor de detención, sólo habla de penetración. Por cierto, el fabricante recomienda no disparar munición del .22 LR en los revólveres con armazón magnum. Para tal efecto se ofrece un cilindro de conversión.

 

NAA Pug, vetado para los aficionados españoles

En el año 2006 mi hermano César visitó la factoría de NAA en Provo para los lectores de esta casa. Hoy, cinco años más tarde, podemos decir que el éxito de estos pequeños revólveres ha ido creciendo con el tiempo. Y es que la lista de potenciales usuarios en los Estados Unidos, crece cada día y no sólo entre los oficiales del orden, donde los revólveres y pistolas North American Arms son regla común como segunda o tercera arma de reserva.  Con la aprobación de la ley federal de reciprocidad de licencias para portar armas ocultas entre estados, la demanda por este tipo de armas, fáciles de ocultar y de muy ligero peso y reducidas dimensiones, es cada vez mayor entre los civiles, basta visitar un TradeShow, un GunShow o simplemente situarse detrás del mostrador de cualquier armería americana para ser testigo de ello. A eso se añade la creciente y buena costumbre de portar armas cortas por parte de los deportistas que ejercen actividades al aire libre en la montaña como los caminantes o los ciclistas. En estos casos, en el verano un revólver como el que traemos a estas líneas con una carga anti-serpientes puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.

Ojala pudiéramos decir que estos revólveres y otras muchas interesantes armas fueran legales en España para los civiles (descontando los cada vez más escasos titulares de licencia B), aunque sólo fueran para colección o como arma de remate en lances de caza, pero como todos sabemos, no es el caso y si seguimos sin unidad de acción y sin hacer nada, cada vez estaremos peor. La verdad es que la desconfianza que muestran las autoridades españolas hacia sus ciudadanos en todos los órdenes de la vida, y en especial en relación con el uso y posesión de armas, es inexplicable y creo que genera una separación cada vez mayor entre los honrados ciudadanos y los poderes públicos. Se aplican restricciones sin justificación alguna en el uso y posesión de armas para fines deportivos y educacionales como son el tiro y el coleccionismo que no tienen paragón entre nuestros socios comunitarios.

¿Por qué sigue vetado para uso civil el .223 Rem y el .308 Win, que en realidad no son ni siquiera cartuchos militares? ¿En qué país comunitario se obliga a competir con un mínimo de puntos a los poseedores de licencias de tiro? ¿En qué país comunitario existe la curiosa interpretación de arma histórica que se aplica en España? Todo ello con el fin de evitar que se puedan coleccionar en estado de tiro armas históricas. ¿Por qué no se elabora una lista oficial de armas consideradas “antiguas”, es decir, con patente anterior a enero de 1890 y por tanto aptas para será amparadas en libro de coleccionista o licencia AE? Es tarea de todos los aficionados buscar la unidad de acción en organizaciones como ANARMA y similares y por supuesto, de los profesionales del comercio armero apoyar en lo posible dichas organizaciones y sus actuaciones legales. Debemos seguir el ejemplo francés y conseguir que la legislación sobre armas tenga un rango de ley y, por tanto, ya no sea elaborada por unos funcionarios de un ministerio si no que dicha legislación sea discutida por nuestros representantes electos en las cámaras legislativas, como ocurre en todos los países de nuestro entorno, es algo de obligado cumplimiento en cualquier sociedad que se llame democrática.

César y Javier García Rodríguez