Smith & Wesson SDVE

La solución a un problema

En enero de 2014 la corporación Smith and Wesson anunció la puesta en el mercado de una nueva pistola: la SDVE recamarada a dos cartuchos, 9 mm. Parabellum y .40 Smith and Wesson.

Un aspecto fundamental para la subsistencia de una empresa es su capacidad de adaptarse a los requerimientos de los nuevos tiempos. Este es el caso de la SDVE que es una SD que cumple con la legislación californiana, como así con la de otros estados e inclusive países, al restringir la capacidad del almacenamiento de munición a 10 cartuchos.

La pistola S&W SD9 reúne las características ideales para uso policial y de defensa a un precio razonable y en dos cartuchos totalmente adecuados. Además, cuenta con un indicador de cartucho en recámara táctico color rojo que recuerda al de las pistolas Luger, tanto por su posición como el poder reconocerlo con sólo pasar un dedo por encima. Esto ayuda sensiblemente a dicho reconocimiento aún de noche. También aporta, un seguro de cargador.

Esta pistola de autodefensa o defensa propiamente dicha, ya que mantiene todos los elementos originales de la SD, como su armazón de polímero de alta densidad con chasis metálico de acero inoxidable y corredera de acero inoxidable con un acabado en dos tonos.

Tiene un cañón de 4” (101 mm.) y todas las pistolas cuentan con unos aparatos de puntería de tres puntos. Su longitud total es de 183 mm., colocándola a medio camino entre las de defensa pura y dura y las de reglamento o tiro deportivo.

Por encima del arco guardamonte, a ambos lados del arma, encontramos una zona rugosa para descanso del índice y así sólo lo introduciremos en el momento de hacer fuego

Su peso descargada es de 643 gramos, lo cual nos habla de un buen control durante la repetición de disparos. Y para lograr esto con toda la precisión que aporta la pistola, es bueno entrenar un poco, para poder estar al tanto en cada momento de cuándo sale el disparo. Esta pistola SDVE tiene un disparador SDT (Self Defense trigger del inglés disparador de auto defensa) que, sin duda, es excelente ya que en todo momento mantiene la misma tensión. Es por ello muy intuitivo y de muy rápida respuesta. Un detalle interesante es que por encima del arco guardamonte encontramos un área rugosa, ésta ha sido diseñada para la colocación del dedo índice; de este modo, solo meteremos el dedo sobre el disparador en el momento de hacer fuego. Dicha zona rugosa la encontramos a ambos lados del armazón de polímero, pues está pensada para un uso ambidiestro.

Siguiendo en el área del arco guardamonte, por delante del mismo encontramos un raíl Piccatiny para adosar cualquier ayuda óptica, lasérica o lumínica.

De su uso obtenemos dos cosas, gran precisión y confianza en que el disparo siempre será un acto volitivo. La precisión la obtenemos de, además de sus características técnicas, el buen ángulo de su empuñadura, 18º, que evita tensiones innecesarias en la muñeca y nos permite, en el plano deportivo, mantener largas sesiones de tiro sin ningún stress añadido.

En España podemos utilizar, de momento, pistolas de gran capacidad de almacenamiento de cartuchos, pero no está demás el ver modelos como el SDVE más que suficiente para repeler cualquier incidente armado.

La principal diferencia es que la SD tiene una capacidad de 16 +1 cartuchos del 9 mm. y del .40 Smith and Wesson contra los 10 de la SDVE.  Otra, son sus cachas antideslizantes con almohadilla de caucho, mientras que la versión californiana es más espartana al contar solo con la rugosidad del polímero.

 

¿9 mm. Parabellum o .40 S&W?

Ambas caras de una misma moneda

El primero es el cartucho más universal desde hace unos años. Apareció en 1902 con la pistola homónima y fue adoptado por el Ejército Imperial Alemán en 1904. A partir de entonces comenzó a popularizarse de tal modo que, en la actualidad, está presente en todas las armas cortas y en los subfusiles automáticos, como así también en carabinas semiautomáticas.

El .40 Smith and Wesson fue una joint venture entre esta firma y Winchester en el año 1989. Fue desarrollado en  seis meses gracias al conocimiento de Mr. Bersett ,de Winchester, y de Mr. Melvin, de Smith and Wesson.

Para entonces el FBI estaba trabajando en un cartucho de 10 mm. de mayor capacidad y longitud que el .40, pero los técnicos citados se dieron cuenta de que con una vaina más corta se podían alcanzar resultados similares, y que esta diferencia permitía usar pistolas del tamaño de las del 9 mm. Parabellum. Su aparición fue el certificado de defunción para el .41 Action Express y opacando el brillo del poderoso 10 mm. Auto.

Indicador de cartucho en recámara

Básicamente, el 9 mm Parabellum desarrolla con 124 grains de proyectil una velocidad inicial de 1.150 p/s con una energía de 364 L/p2 y el .40 S&W con 155 grains vuela a 1.205 p/s con una energía de 500 L/p2; es decir, se coloca al nivel del .357 Remington Magnum, pero en pistola.

Evidentemente, la mayor aportación de energía del .40 S&W tiene un coste y es una relevación y retroceso mayor que el 9 mm. Parabellum; por tanto, la elección de uno u otro depende más que de los datos técnicos de cada cartucho de la maestría del usuario, quien sabrá sacarle más o menos partido a uno u otro.

 

Conclusión

La gama de pistolas Smith and Wesson SD cuentan con un buen número de seguidores debido, fundamentalmente, a sus buenas prestaciones en cuanto a seguridad, rapidez de respuesta y de tiro junto con una gran precisión.

Con estas modificaciones podemos estar o no de acuerdo, pero lo que no es discutible es que Smith and Wesson tiene un preocupación constante por la adecuación de sus armas a las legislaciones y así poder servir su producto a su clientela.

 

Nota: agradezco la cesión de material para este reportaje a Borchers S.A., C/ Industrialdea 22, Guernica. 48300 Vizcaya. Tel: 946.252.029. www.borchers-sa.com

Gene Austin