Remington Versa Max Sportsman, cal. 12 – 70, 76 ó 89 mm.

La renovación de un gran éxito

Mi gusto por las escopetas siempre se decanta por las paralelas de pletina completa, pero jamás dejo de reconocer que las semiautomáticas aportan grandes ventajas: como que me es más fácil apuntar con un único cañón que con dos, que el sistema de recuperación del automatismo sirve para reducir mucho el retroceso y, ya sea en una tirada de plato o en una cacería de patos, donde se utiliza cartuchería pesada, el hombro al final de la jornada lo agradece.

 

El tiempo pasa

“…Y nos vamos poniendo viejos” dice la canción, pero cuando vemos el adelanto que traen las nuevas armas, nos damos cuenta de que hacen todo lo contrario, rejuvenecen. Más y más aportaciones hacen que éstas se tornen infalibles, ligeras, robustas o que nos ayuden a mejorar nuestras artes como tiradores.

Los mandos están a una distancia correcta.

La Versa Max fue presentada en sociedad en 2010 y ahora traemos un nuevo modelo actualizado, el Sportsman. Fundamentalmente, hallamos en ella la última tecnología en automatismo, ya que se han mantenido los desarrollos y aportaciones que hicieron que la Versa Max obtuviera los premios de las revistas: Golden Bulleseye, de American Rifleman, y “Best of the Best”, de Field and Stream. Otro activo de esta escopeta es que se trata de un producto “made in America”. Sé que algunos creen que el promover los productos nacionales carece de importancia, pero desde mi particular punto de vista es todo lo contrario, ya que si en España si hiciera lo mismo, es decir, con reglamentos de armas justos y desarrollados por personas que entienden del tema, nuestra industria armera no estaría en la situación que se halla. Sería todo lo contrario convirtiéndose en un foco de creación de empleo, como lo fue hace años. Pero con normas como que un pequeño taller tiene que tener un vigilante de seguridad, pocas armas se podrán vender, ya que estos costes extra recaerán sobre los productos. Y resulta que tenemos un Ministerio que se llama de Economía y Competitividad ¿qué competitividad podemos tener con “aciertos como ése”? O acaso no saben que el Banco de Pruebas de Brescia punzona más armas en un mes que el de Eibar en un año. Mas no quiero calentar mi pluma, porque ya sabemos que a los Ministerios poco les importa el principal problema de España: el desempleo.

Volviendo a nuestra escopeta vemos que un sólido cierre de dos tetones giratorios en la cabeza, VersaPort™ Gas System, asegura el conjunto, permite manejar las presiones de los cartuchos de 3 ½” con soltura y, que si los mezclamos con los normales de 70 y/o 76 mm., veremos que el automatismo no se reciente, sino que opera de un modo inmutable. Para ello se vale de un doble pistón que funciona directamente proporcional a la longitud de cartucho; para entendernos, con uno de 89 mm. opera con tres de los siete agujeros que hay en el cañón y con uno de 70, al ser más corto, los utiliza todos. Es decir, un cartucho más potente (como el de 89 mm.) transfiere su energía a través de los gases de tres agujeros y el menos potente (de 70 mm.)  lo hace por los siete para comunicar un mismo, o al menos similar, caudal de presión. Con esto se autoregula constantemente y por ello se pueden mezclar cartuchos de distinta longitud sin perjuicio del semiautomatismo.

Armarla es realmente fácil

Como el cierre se verifica en el cañón, la carcasa es de aluminio aeronáutico. En su parte superior encontramos cuatro taladros que nos permitirán acoplar cualquier dispositivo óptico, lasérico o de punto rojo que nos ayude en la precisión total.

La capacidad del cargador tubular en calibre 12 es de: 3+1 en cartuchos de 70 y 76 mm. y de 2+1 en los de 3 ½” (89 mm.).

El cañón es uno de los más duros del mercado al estar construido en acero 4140 forjado y tiene dos longitudes a elección: 28” (70 cm.) es la que he tenido oportunidad de probar y 26” (66 cm.).

El mirín frontal es de material sintético blanco y en el primer tercio del cañón encontramos otro de acero.

La culata y la chimaza son de material sintético, que presenta diferentes rugosidades al tacto en ciertas zonas para dar mayor seguridad al asimiento. Como opcional, le podemos agregar espaciadores para prolongarla. También existen diferentes acabados de camuflaje: Mossy Oak: Duck Blind y Obsession Turkey y Real Tree AP Camo.

La culata está rematada por una cantonera realmente absorbente del retroceso, es la llamada SuperCell; sobre todo si disparamos con cartuchería de 89 mm. veremos sus ventajas. Una diferencia entre la Sportsman y la Versa Max a secas, es que la primera no se puede regular el cast off ni el grado de inclinación de la culata.

Otras versiones son: Tactical, Synthetic, Realtree camo, Waterfowl, Zombie Gargoyle Green, Zombie Pink Explosion.

 

Cazando platos

Con la Sportsman podemos cargar entremezclando cartuchos de diferentes longitud y potencia

Ya que patos no podía cazar me dirigí un campo de tiro y allí me dediqué a solazarme con una sesión de tiro entre semana, con lo cual conjugaba dos cosas, me escapaba de la oficina y pegaba unos tiros.

Utilicé munición Remington por ser fiel con la escopeta: Sureshot de 7º de 70 mm. y  cartuchos de varias marcas de 76 con 52 gramos, los entremezclé y, sin saber cuál disparaba, comencé a tirar a los platos. Los que rompí no podría decir a ciencia cierta con qué munición fue, aunque en algunos sentí la diferencia de los 36 a los 52 gramos, pero sí puedo decir que no hubo ninguna interrupción; es decir, el VersaPort™ Gas System funciona de verdad sin importarle el cartucho que dispara. Sin lugar a dudas, esta escopeta es algo distinto a lo que ya conocíamos y, por encima de todo, a buen precio.

Buena caza

Nota: agradezco la cesión de material para este reportaje a Borchers S.A., C/ Industrialdea 22, Guernica. 48300 Vizcaya. Tel: 946.252.029. www.borchers-sa.com

Saúl Braceras