Martini

El primer rifle moderno

La saga de las armas creadas por Friedrich von Martini fue de las más importantes del tercer tercio del siglo XIX. La acción pivotante-descendente salió del genio de este diseñador de armas suizo establecido en Fraunfeld hacia 1860.  Tenía la particularidad de ser extremadamente fuerte, fácil de producir, ya que llevaba muy pocas piezas, y muy fácil de usar. Esto significó su ascenso inmediato en el panorama internacional de las armas, tanto militares como deportivas. Sin duda, el gran espaldarazo fue la adopción por parte del Imperio Británico en 1871, que dio origen al Martini-Henry, ya que utilizaba un cañón con el estriado diseñado por Alexander Henry, en calibre .577/450 de pólvora negra, con lo cual, y debido a la extensión de aquél, los fusiles y carabinas se propagaron por todos los continentes. Esta acción tenía un único inconveniente, carece de seguro, aunque sí podemos desamartillarla y una vez abierta presionamos el disparador y acompañamos el asa de apertura hasta la posición de cerrada.

Un Tommy (soldado británico) apuntado con su Martini-Henry

No obstante, su uso alcanzó a la mayoría de los fabricantes de armas británicos, como Jeffery, Westley Richards, BSA, Army and Navy (Cooperativa del Ejército y Marina), Greener, Lang, Moore, Vickers, etc. En la mayoría de los casos se trataba de armas de caza (rifles y escopetas) o de tiro, pero no sólo me refiero a armas largas, sino que también se hicieron pistolas. Evidentemente, estas últimas son muy raras, pues los revólveres ya se habían instituido en todo el mundo desde la época de avancarga. Por esta razón las pistolas dotadas del sistema Martini son muy buscadas por los coleccionistas.

Sin duda, la mayoría de las armas en el sistema Martini son de origen británico, pero en Europa no pocos fabricantes los produjeron, tanto en versión deportiva como militar, a saber: Beretta de Italia; varios talleres de armas de Saint Etienne, Francia; August Francotte de Lieja, Bélgica; Österreichische Waffenfabriks Gessellschaft de Steyr, Austria y varios arsenales, como el de Thun, en Suiza, etc. Los rifles de estos últimos de allende los Alpes fueron sobre todo armas de tiro de reputadísima calidad y usualmente utilizaban el calibre militar de las naciones más avanzadas; asimismo, supieron pasar del cartucho de pólvora negra a los nitro, pues el sistema se lo permitía con holgura. Eran armas muy sofisticadas destinadas al tiro de precisión, lo que hoy llamaríamos Fusil libre 300 m. y para eso iban dotadas de miras ortópticas y champiñón en la chimaza. La única limitación que tiene el sistema Martini es la longitud del cartucho, no tanto la presión que éste genere.

También son destacables las armas hechas por August Francotte de fuego anular en calibre 6 mm. Francotte Long Porte y en .22 LR, que se vendían como carabinas de jardín y se produjeron en grandes cantidades.

Por último, también se han fabricado fusiles y carabinas con sistema Martini en Pakistán e India. De hecho, me llamó poderosamente la atención un fabricante paquistaní que encontré hace años en el IWA y que fabricaba rifles deportivos en los siguientes calibres: .303 British, .243 Winchester y 6,5x57R. También son conocidas las armas producidas por la tribu Pathán o Pashtún de los montes Himalaya entre Afganistán y Pakistán.

 

En Gran Bretaña

Comparación entre una carabina Martini de Westley Richards y una August Francotte ambas Take-Down con acción desarmable en .22 LR

Al haber sido reglamentario en las Fuerzas Armadas del Imperio (británicos, canadienses, australianos y neozelandeses, es decir, tropas blancas) su uso se extendió por todo el territorio y cuando dejó de estar en primera línea de combate, las acciones Martini fueron utilizadas para todo tipo de rifles, carabinas y escopetas en el plano deportivo.

No obstante, dejar de ser el arma reglamentaria del Tommy no quiso decir que dejara todas las Fuerzas Armadas, ya que los gurkhas nepalíes lo siguieron usando hasta la Primera Guerra Mundial y una versión de fusil Martini con cañón liso que tiraba un proyectil esférico calibre .45 fue utilizada por la Policía India. Como vemos, los británicos no tenían mucha confianza en esta fuerza indígena y prefirieron armarla con un fusil de baja precisión y energía, por aquello de “just in case”, pues la rebelión de los cipayos de 1857 les quedó grabada en su mente.

En la actualidad, las armas Martini gozan de mucho predicamento entre los coleccioncitas a secas y coleccionistas activos, como mi amigo Carlos Coto, nos ha calificado, al ser usuarios de éstas tanto en la caza como en el tiro.

Comparación entre dos Martini (abajo) Jeffery cal. .300 H&H Mg. Take-down y un BSA en .303 British

En otra oportunidad publiqué un artículo sobre mi Jeffery Take-Down del .300 Holland and Holland Mágnum, que entiendo que junto con algunos en .500 Nitro fueron los cartuchos más grandes que se utilizaron con esta acción. Debido al éxito en cuanto a aceptación, su vida activa ha sido longeva, ya que entre 1871 y la década de 1950 se fabricaron armas militares y deportivas, como podemos ver en las reproducciones de catálogos de época. Las últimas armas producidas en este sistema fueron las Vickers Empire y sus modelos siguientes, tanto en calibre .22 LR como en .22 Hornet. Este Vickers fue adecuación de la Martini, permitiendo que fuese retirada del cajón de mecanismos para la limpieza del cañón, ya que en la original, salvo en los modelos Take-Down, había que hacerlo por la boca. Qué duda cabe que el período comprendido entre 1880 y los años 30 del pasado siglo es para los coleccionistas de armas el mejor momento en cuanto a creatividad y excelsa ejecución, dado que la producción durante ese período fue magnífica.

Han pasado casi 150 años desde la adopción del Martini-Henry por parte de las Fuerzas Armadas británicas y aún podemos disfrutar de las bondades de esta acción. No muchas armas pueden decir lo mismo. Más aún, ¿cuántas de las actuales sobrevivirán el mismo lapso?

Saúl Braceras