Escopeta Pardus  Mod. PS de corredera Cal. 12

La herramienta del cazador

Es público y notorio que la escopeta de corredera o de trombón es un desarrollo totalmente estadounidense. Es allí donde estas armas han proliferado desde el primer momento en que aparecieron a finales del siglo XIX. Y nacieron del genio creador de John M. Browning cuando trabajaba para Winchester. Su primer modelo fue el 1893, pero el más popular fue el 1897 que, además, fue reglamentario en el Ejército y en el Cuerpo de Marines de los Estados Unidos de Norteamérica y que rápidamente fueron puestas en acción en la Insurrección de los moros en Filipinas. El resultado del uso militar de escopetas cargadas con cartuchos con postas fue espectacular, sobre todo en las distancias cortas de la selva filipina.

Para el desarrollo de la actividad cinegética se vale de un cañón de 66 cm. de longitud y de tres choques intercambiables.

El principal problema, y que de ahí derivó en el uso de las escopetas, fue que los guerreros moros que iban drogados con alucinógenos muy potentes y soportaban bien el castigo de las balas de calibre .30-40 de los fusiles Krag y mucho más los tímidos proyectiles de los revólveres Colt modelo 1889 New Navy en .38 Long Colt, de hecho, volvieron a utilizar los Colt Frontier en .45 Long Colt de pólvora negra, pues tenían mayor poder de detención. Hay una película muy interesante, La Jungla en Armas con Gary Cooper, donde se ven estos hechos.

 

 

¿Dónde radica el éxito de las escopetas  de corredera?

La corredera es de aleación ligera y tiene un baño anodizado mate.

Ante todo la practicidad y facilidad de construcción han asegurado muy buenos precios y un funcionamiento perfecto. Como ya adelanté en mi anterior artículo, revista Armas y Municiones nº 373, página 82, sobre la Pardus Mod. PX D, estos dos conceptos la han inmortalizado, pues aún hoy en día las Fuerzas de Seguridad siguen confiando en ellas y no tanto en las semiautomáticas. En su labor encuentra otro aspecto importante, el disuasivo, pues con solamente escuchar el sonido de su acerrojamiento, muchos ya pierden todo interés en hacer algo indebido. Este aspecto también es importante en el uso de estas armas como defensivas, pues la mejor forma de acabar con una buena defensa es no tener que llevarla a cabo.

Tiene una ventana de expulsión amplia.

Su rapidez en la recarga de munición es casi igual a la de una semiautomática, ya que con el retroceso nuestra mano no tiradora y que sujeta la chimaza, en un movimiento espontáneo abre el cierre y con solo extenderla la volvemos a cerrar con un cartucho fresco en la recámara.

Además, si nuestro deseo es darle un mayor uso como el de disparar con bala tenemos la ventaja de un único cañón para ponerla a tiro. También comparten dos preeminencias con las escopetas semiautomáticas, la dicha, y la posibilidad de desarmarlas en dos partes.

Esta escopeta, como la mayoría de este tipo de armas, lleva un sistema de seguro transversal que actúa sobre el disparador.

Otro sí digo, es que en el caso de disparar con balas, podemos montar muy fácilmente cualquier tipo de visor u ayuda óptica en su armazón. A esto sumamos que carecen de la limitación de dos cartuchos en el cargador en su actividad cinegética (dependiendo de la zona donde usted reside), ya que ésta solo compete a las semiautomáticas.

La Pardus  Mod. PS, a diferencia de la PX, es una escopeta netamente de caza o de tiro al plato, mientras que la PX es una táctica. Para el desarrollo de la actividad cinegética se vale de un cañón de 66 cm. de longitud y de tres choques intercambiables (1, 3 y 4) con lo cual salva con facilidad cualquier reto que de su uso se desgaje. Lleva solista ventilada y un mirín de fibra óptica naranja. La carga de munición en el cargador tubular es la habitual en este tipo de armas: a través de una ventana en la parte inferior del armazón.

Ventana para la introducción de cartuchos en su cargador tubular.

La corredera es de aleación ligera con acabado de baño anodizado mate. Posee una ventana de expulsión amplia que garantiza la evitación de cualquier problema de extracción de la munición una vez disparada.

La Pardus PS está dotada, como la mayoría de este tipo de armas, de un seguro transversal que actúa sobre el disparador.

Presenta una culata sintética, lo cual es de agradecer en este tipo de armas económicas, ya que si utilizasen madera sería corriente y con menores prestaciones que aquellas. Está rematada por una cantonera de goma muy elástica que absorbe bien el retroceso. En el pistolete encontramos un segrinado de inyección, lo cual es perfecto, pero y especialmente en la chimaza tiene profundas y fuertes ranuras de sujeción. Esto último es vital para la recarga correcta del arma.

Su peso aprox. es de 3,150 Kg y lleva incluido tres choques 1-3-4. Como advertí su precio es económico: 390,00 euros.

Disparando con la Pardus PS

Una solista ventilada corona el cañón y lo remata un mirín de fibra óptica naranja.

Dadas sus dimensiones y peso es un arma muy fácil de utilizar, totalmente instintiva y, al tener una culata neutra en cuanto al cast-in o cast-off, sirve para todo tipo de tiradores diestros o zurdos.

En la chimaza tiene profundas y fuertes ranuras de sujeción. Esto último es vital para la recarga correcta del arma. 

 

 

Se puede vaciar el cargador de munición en segundos y con precisión. Por contrapartida, el retroceso seriado es más recio que cuando se dispara, dejando cierto tiempo de recuperación entre tiro y tiro. No obstante, es tolerable.

La culata sintética es de agradecer en este tipo de armas económicas, ya que si utilizasen madera sería corriente y con menores prestaciones que aquellas.

Pienso que la Pardus PS dará buenos momentos de caza a aquellos que se decidan por ella.

Nota: agradecemos a Armería Izquierdo, C/Muñoz Grandes, nº6, 13630 Socuéllamos (Ciudad Real), tel: 926 53 11 46, la cesión del material para la redacción de este reportaje.

 

José Cid